Presentan en FIL Minería Enfoque en Liderazgo Positivo, herramienta para transformar el bienestar en las organizaciones

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23 julio 25

Presentan en FIL Minería Enfoque en Liderazgo Positivo, herramienta para transformar el bienestar en las organizaciones

Con la intención de romper los paradigmas que durante años han existido para hablar de bienestar en las empresas a través de una herramienta práctica, Iván Guerrero y Rosalinda Ballesteros presentan Enfoque en Liderazgo Positivo, primer libro de la colección Factor Wellbeing, desarrollada por el Instituto de Ciencias del Bienestar Integral de la Universidad Tecmilenio.

Como parte de la colección Factor Wellbeing (2021), Enfoque en Liderazgo Positivo aborda el segundo de los cuatro componentes que conforman el modelo BEAT (Bienestar organizacional; Enfoque en liderazgo positivo; Ambiente positivo y Trabajo significativo).

Este modelo es un manual que conduce al estado más saludable en una organización, donde líderes y miembros del equipo se sienten validados e inspirados.

“Cuando comenzamos este proceso, nosotros como Instituto teníamos una consigna de trabajar en que la persona pueda construir una vida de bienestar integral, pero, sobre todo, que genere un compromiso por impactar el ambiente en el cual se desenvuelve”, comentó durante la presentación de esta obra en la FIL de Palacio de Minería, Iván Guerrero, co autor de la obra y Director de Soluciones Empresariales en Bienestar en Tecmilenio.

Al hablar del enfoque en liderazgo positivo -la segunda división del modelo-, hay una subdivisión de niveles. Este primer nivel es el compromiso con uno mismo en el trabajo, donde se aborda la importancia de desarrollar conductas saludables a nivel personal.

Alimentación, descanso, ejercicio, gestión del estrés y fomentar buenas relaciones, son algunas de las conductas en las que precisa Guerrero para generar mejores condiciones de desempeño, subrayando que estas acciones son lo que se conoce como autocuidado.

El segundo nivel se refiere al compromiso saludable hacia el trabajo, encontrada en el estudio como la variante “Balance vida-trabajo”, donde se destaca la importancia de asignar horarios equilibrados al desempeño profesional, así como a la realización personal.

De acuerdo con un estudio lanzado en 2024 por la Organización para la Cooperación y el Desarrollo Económicos (OCDE, por sus siglas en inglés), México es el país donde más se trabaja a nivel global, dedicando cerca de 2,226.3 horas anuales por empleado.

Lo anterior, invita a replantear métodos y dinámicas, donde -previo a cambios en las legislaciones laborales- los líderes puedan generar una atmósfera cálida y confortable para sus equipos, donde además se incentiven prácticas que inviten a la desconexión.

“Hemos hablado con organizaciones y líderes para sugerirles buscar momentos durante su jornada en donde puedan recuperarse, retomar su habilidad de concentrarse, de atender lo que deben resolver para que sí puedan estar preparados ante esas circunstancias.”

A nivel relacional, la guía aborda también la Maestría Emocional, que concentra cuatro habilidades y la capacidad de utilizarlas como información que permita tanto a colaboradores como a líderes, tomar las mejores decisiones dentro del equipo de trabajo.

En primer lugar se sitúa Inteligencia Emocional, que habla del reconocimiento al estado de ánimo propio; la segunda tiene qué ver con cómo conectar esa emoción con la situación que la provoca, haciendo asociaciones que permitan identificar en qué momentos surge.

La tercera habilidad propone darle un significado a la situación; mientras que la cuarta se refiere a mover las emociones, proponiendo situaciones como: “¿Quiero seguir sintiendo esto?”, llevándonos a buscar más experiencias que lo generen o bien, cambiando la ruta.

Al tener el enfoque en líderes, Guerrero plantea los beneficios de explorar en la empatía y la cercanía con los miembros del equipo, pues conocer el contexto y estado físico-mental de los colaboradores, revela además las causas que pueden estar dificultando su crecimiento.

“Cuando tienes esta visión del cuidado de bienestar de las personas, puedes identificar cuáles son las condiciones de trabajo que facilitan que se sientan bien, y si la persona no está pasando por un buen momento, identificar qué está provocando ese malestar.”

Asimismo, el autor agregó que este involucramiento genuino permite conocer a la persona detrás del colaborador, reconociendo sus necesidades familiares y sociales, factores que en ocasiones dificultan sus capacidades de desarrollo y compromiso.

“El líder debe de ser consciente que somos humanos fuera del ambiente de trabajo y que tenemos todos necesidades. El tener esa conversación más profunda me ayuda a entender cómo está la persona y a lograr mejores acuerdos de trabajo.”

Cada capítulo del libro propone un “Laboratorio de bienestar”, abordando un autodiagnóstico con escalas que miden conductas saludables; inteligencia emocional y liderazgo involucrado (la capacidad de conectar con las personas y atender sus necesidades).

Finalmente, Guerrero destacó que a la organización no le genera ningún costo participar en la metodología del Factor Wellbeing y la data que se ha recabado a través de la implementación de las buenas prácticas, se reporta en los siguientes porcentajes:

Al desempeñarse en un ambiente propicio, se disminuyen los productos defectuosos en un 41%; se reduce el ausentismo hasta en un 81%; se reportan hasta 64% menos accidentes de trabajo; hay un 23% de mayor rentabilidad y un 18% de mayor productividad.

 

Referencias

 


Autora: Ivonne Vargas Hernández. Editora en Jefe Observatorio Instituto Ciencias del Bienestar Integral. Autora, analista laboral y periodista especializada en Recursos Humanos y Gestión de Talento.

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