Liderazgo con sentido: cuando el ‘propósito’ entra a la sala de juntas

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09 septiembre 25

Liderazgo con sentido: cuando el ‘propósito’ entra a la sala de juntas

Los mejores directores son los que han dejado de pensar que escuchar a sus colaboradores es una perdida de tiempo”: Ignacio Bonasa.

En mayo pasado se concretó una alianza estratégica entre ambas instituciones con el objetivo de impulsar el bienestar integral en el ámbito organizacional, compartiendo conocimiento y mejores prácticas. Esta colaboración abre la puerta a nuevas iniciativas educativas, incluyendo programas académicos, maestrías y recursos digitales. 

Como parte del acuerdo, se desarrollarán propuestas formativas y herramientas digitales que incorporan la metodología única de LIDERARTE: el Aprendizaje por el Arte. Este enfoque vivencial se apoya en cuatro pilares fundamentales —Aprendizaje, Actitud, Alma y Acción— para promover una transformación profunda en las personas y en la cultura corporativa. También contempla la promoción del distintivo Factor Wellbeing*, en España, identificando y acompañando a empresas que aspiren a convertirse en referentes en salud emocional, clima positivo y sostenibilidad humana. 

Además, se impulsarán iniciativas para difundir programas de alta especialización como el Máster en Liderazgo Positivo y el Máster en Educación Positiva, títulos avalados por Tecmilenio y cada vez más demandados por directivos comprometidos con un nuevo paradigma empresarial. 

Para profundizar en el alcance de esta alianza y su impacto en la transformación del liderazgo organizacional, conversamos con Ignacio Bonasa, presidente de LIDERARTE, quien nos compartió su visión sobre lo que implica liderar desde el alma. 

Una vinculación humanamente diferente 

Lo que distingue a LIDERARTE es su enfoque de formar líderes a partir del arte, la cultura y la inteligencia emocional. Esta metodología, según Bonasa, responde a una carencia del sistema educativo, que históricamente ha privilegiado la inteligencia racional por encima de la emocional. Como él mismo menciona: “Nos enseñan logaritmos matemáticos, pero pocas veces o nunca enseñan a las personas a conocerse a sí mismas y gestionarse”. 

 

El programa “Resetéate”, impartido por LIDERARTE, es un ejemplo concreto de este enfoque. A través de él, los participantes redescubren actividades artísticas y recreativas como herramientas para mejorar su autogestión, conexión emocional y sentido de propósito. 

Este enfoque resulta, además, profundamente transformador para el liderazgo empresarial, ya que promueve lo que Bonasa define como “liderar con el alma”. A continuación, compartimos algunos de los fragmentos más relevantes de nuestra conversación con él: 

¿Qué significa liderar con el alma en el contexto organizacional actual? 

Significa liderar desde lo emocional, desde la inspiración, desde el propósito, lo cual implica tener un interés genuino por las personas. Las personas saben cuándo alguien se interesa por ellas solo para pedir resultados, o cuando existe la intención real de ayudarlas en su desarrollo. 

“No hay que pedir resultados cuando se lidera con el alma. Las personas se adhieren al líder y entregan compromiso por sí mismas. Es una cadena natural: interés genuino, compromiso genuino, resultados genuinos.” 

¿Qué les dices a quienes argumentan que no tienen tiempo para este tipo de liderazgo? 

Yo siempre digo: ¿cuánto cuesta, en términos de tiempo, preguntar a una persona cómo se siente? ¿O felicitarla por algo que ha hecho bien, aunque sea algo cotidiano? 

Hay líderes que solo felicitan cuando ocurre algo excepcional, ¿y si eso sucede cada 40 años? Por lo tanto, no es cuestión de falta de tiempo, sino de falta de predisposición. Lo único que deben hacer es sustituir gasto por inversión de tiempo, “vitaminando” a los equipos de trabajo con acciones como escuchar. 

Así que la premisa es: “Sustituye gasto por inversión de tiempo”. 

¿Encuentras diferencias entre la cultura empresarial en América Latina y la cultura en Europa?  

Sí, hay diferencias culturales, pero al final existe un sustrato común: tú preguntas a un colaborador, ¿tu jefe tiene interés genuino en ti?, y da igual si estás en España o en México, porque todo el mundo entiende lo mismo por interés genuino. Es decir, pueden variar los estilos, pero el trato humano es universal. 

Por eso, todo lo que hagamos con esta alianza puede transformar culturas. Si logramos llevarlo a las empresas, acabaremos unificando visiones. Al final, solo hay una cultura válida: la del propósito, la de tener organizaciones con alma. Eso es lo que realmente marca la diferencia. 

¿Cómo se puede impulsar una formación más enfocada hacia el bienestar organizacional? 

Yo llevo un mensaje claro: si sigues con la formación tradicional, obtendrás resultados tradicionales. Si deseas resultados diferentes, necesitas una formación diferente. 

Hoy, lo que nos distingue de la inteligencia artificial es la capacidad de humanización: preocuparnos por las personas y su bienestar. Si quieres resultados felices, necesitas personas felices que los generen. Porque una persona tóxica produce resultados cortoplacistas, que terminan generando víctimas. 

Estoy convencido de que vamos a lograr mucho. Esta alianza no es una foto, es una misión. Vamos a llevar el modelo del Instituto a España, replicar su rigor científico, su enfoque positivo y compartir experiencias. Soy un convencido y embajador absoluto de lo que se ha construido aquí. 



Autora: Ivonne Vargas Hernández.

Editora en Jefe Observatorio Instituto para el Propósito y Bienestar Integral. Autora, analista laboral y periodista especializada en Recursos Humanos y Gestión de Talento. 

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